La ganancia de masa muscular es uno de los procesos que más quebraderos de cabeza a las personas que recién inician en el entrenamiento de fuerza. Seguramente notaste grandes mejoras durante las primeras semanas pero ahora te encuentras algo estancado, sientes que tus músculos ya no crecen como antes y te preguntes por qué.

Bueno, la respuesta es simple, es común en personas desentrenadas ganar masa muscular muy rápido al principio, e incluso bajar de peso a la vez. Sin embargo, una vez ya llevas cierto tiempo entrenando tu cuerpo necesita algo más que tan solo entrenamiento para aumentar de tamaño.

En este post encontrarás las claves que te permitirán ganar músculo más fácilmente y acercarte a lograr tu cuerpo deseado, ¡comencemos!

¿Por qué no gano músculo?

Lo primero de todo es saber cómo funciona nuestro organismo. La ganancia de masa muscular se produce gracias a un proceso llamado hipertrofia, esto se da gracias a que nuestro cuerpo percibe el entrenamiento como un estresor, y trata de adaptarse.

De esta manera nos hacemos cada vez más fuertes, primero a través del sistema nervioso el cuál nos permite reclutar más unidades motoras (UM`s), las cuáles nos permiten ejercer más fuerza.

Sin embargo, llega un momento en el que no existen más unidades motoras que reclutar dentro de las fibras musculares; es en este punto donde el cuerpo tratará de crear más fibras musculares lo cuál supondrá un incremento de la fuerza y por ende, de ganancia muscular.

¿El principal problema? Los cambios a nivel estructural (creación de nuevas fibras), supone un gran gasto de energía y necesita de una gran cantidad de proteínas para producirse, y es aquí donde fallan la mayoría de personas, ya que no siguen una dieta lo suficientemente alta en calorías y/o en proteínas, que le dé el sustento necesario a su cuerpo para generar cada vez más y más masa muscular.

Nutrición

Ahora que conoces el problema, la solución es simple: debes aumentar la ingesta de calorías y proteínas que ingieres. Para ello tienes que saber cuáles son tus calorías de mantenimiento en función de tu peso corporal, edad, género y actividad física; esto se  conoce a través de la tasa metabólica basal (TMB).

Nota: existen varías calculadoras de TMB en internet, solo tienes que ponerlo en el buscador y listo, tendrás una estimación sobre cuántas calorías deberías estar consumiendo.

Una vez tengas el número total de calorías (TMB), solo tienes que aumentar ligeramente la cantidad entre 200-500 kcal hasta que notes que empiezas a ganar peso.

Realmente no importa el tipo de alimentos que ingieras, sin embargo, trata de buscar siempre alimentos de origen natural y prioriza las comidas de calidad sobre los alimentos de preparación rápida y procesados.

Conceptos importantes

No por comer más ganarás más rápido masa muscular, recuerda que tu alimentación debe mantenerse estable y es necesario tratar de reducir la ingesta de grasa lo máximo posible y aumentar la de proteínas. Así como realizar la etapa de volumen de manera controlada y progresiva con alimentos de calidad, de lo contrario comenzarás a ganar grasa en lugar de músculo, e imagino que no es lo que querrás.

Además mantener un descanso adecuado es fundamental, ya que si el músculo no se recupera trás tus sesiones de entrenamiento (ya sea por un mal descanso o por
sobreesfuerzo), el excedente de energía y proteínas irán destinados a reparar los tejidos en lugar de crear nuevo músculo – no puedes construir sobre una casa que se está rompiendo.

La menopausia es algo inevitable en la vida de una mujer, esta se produce cuando se agotan las reservas de ovocitos en nuestro cuerpo, y esto hace inviable la capacidad para seguir ovulando correctamente.

Sin embargo, ¿es tan mala como para preocuparse por ello? La verdad es que no, es un proceso natural con el que antes o después tendremos que convivir, y por ello mismo no podemos temerle o verlo como un enemigo.

Generalmente los síntomas varían de una mujer a otra, pero la mayoría pueden verse reducidos con una buena alimentación y actividad física. En este post encontrarás varios tips y consejos nutricionales, que te ayudarán a reducir la sintomatología y mejorar tu salud casi de inmediato. ¡Comenzamos!

Síntomas comunes y cómo afrontarlos

La menopausia no es algo que aparece de repente y condiciona nuestra vida de inmediato, sino que sus síntomas van apareciendo progresivamente durante un periodo que puede durar meses o años, este periodo se conoce como perimenopausia, y es la antesala de la menopausia, de manera que cada vez se irá produciendo la menstruación de forma más irregular hasta que esta se corta por completo.

Los síntomas más comunes durante este periodo y la menopausia son:

• Periodos menstruales irregulares.
• Problemas para conciliar el sueño.
• Mayor fatiga y cansancio general.
• Alteraciones en el estado de ánimo.
• Pérdida de masa muscular y de densidad ósea.

Una vez inicia el periodo de la menopausia suele mantenerse entre 2 o 5 años, siendo este el tiempo que necesita nuestro organismo para adaptarse a la falta de ovocitos y
volver a estabilizarse.

Pero esto no significa que sus síntomas desaparecerán, al contrario, si no se han tomado precauciones es posible que estos deriven en otras patologías como la osteoporosis o la sarcopenia.

Recomendaciones nutricionales

 

Lácteos

Aumentar la ingesta de lácteos incrementará los niveles de proteína y calcio necesario para la formación y mantenimiento tanto de músculos y huesos, además lácteos como el yogur, el queso o la leche son alimentos muy ricos en vitamina D lo cuál también ayudará a reducir la descalcificación de los huesos.

Hidratos de carbono

Los hidratos de carbono son la principal fuente de energía de nuestro organismo, por ello son una parte importantísima en nuestra dieta. Especialmente los hidratos de absorción lenta como los que encontramos en los cereales o el arroz, te aportarán toda la energía que necesitas y te ayudarán a sentirte menos cansada.

Agua

Lo ideal durante esta etapa es beber alrededor de 1,5 litros de agua al día, sin embargo esto puede variar según la época del año y la persona, así que asegúrate de mantenerte tan hidratada como te sea posible.

Pescado y carnes magras

Como ya hemos dicho el consumo de proteína es fundamental para evitar la pérdida de masa muscular, por lo que incluir en la dieta carnes magras como pollo o pavo, y pescado (especialmente pescados blancos para reducir la ingesta de grasas) es fundamental durante este proceso.

Otras recomendaciones

Además de las recomendaciones alimentarias, es imprescindible seguir manteniendo un ritmo suficiente de actividad física, y programar un descanso suficiente.

Salir a caminar durante 30 minutos diarios, y establecer rutinas del sueño es algo que todas deberíamos priorizar a lo largo de nuestra vida.

Cuando hablamos de hacer ejercicio, todos hemos empezado en algún punto, sin importar cuando haya sido. Incluso los mejores atletas, futbolistas o nadadores mundiales fueron principiantes en algún punto de su vida.

Ya sea que lleves meses o años sin realizar una rutina de ejercicios o que simplemente seas un principiante que no sabe por donde empezar, este artículo va para ti. Comenzar con ejercicios para principiantes es la mejor manera de poner tu cuerpo en marcha.

Muchos clientes llegan a nuestra clínica con una duda muy repetida ¿Es necesario apuntarme a un gimnasio para empezar a hacer ejercicio? Nuestra respuesta es clara: rotundamente no. Tanto para perder peso, fortalecerse, ponerse en forma, o para desarrollar musculo, no es necesario ir a un gimnasio. Existen rutinas de ejercicios diseñadas para cada situación y objetivo.

Además, los entrenamientos en casa tienen muchas ventajas, ya que ahorras tiempo, dinero y tendrás la libertad de hacer ejercicio en cualquier momento con la comodidad de estar en tu hogar. La clave es contar con una rutina de ejercicios diseñada para ti y con la que te sientas cómodo.

Rutina de ejercicios para principiantes

Te presentamos una buena rutina de ejercicios en casa para los principiantes, sin necesidad de contar con equipo especial, simplemente tu cuerpo. Además, es breve y se centra en la intensidad.

Para que este entrenamiento funcione de una mejor forma, es importante que te centres en hacer el mayor numero de repeticiones posible a una intensidad alta. A medida que vayas avanzando y cada vez te resulte más fácil llegar al numero de repeticiones aquí establecido, auméntalo en base a tus posibilidades.

En caso de que el número de repeticiones sea muy elevado para ti, simplemente redúcelo a una cantidad en la que observes que eres capaz de realizar. Esto es muy importante, porque si fuerzas tu cuerpo más de lo debido es posible que te acabes lesionando.

Haz tres series de la siguiente rutina de ejercicios, y toma un descaso de unos 20 o 30 segundos antes de cada ejercicio:

• 10 Flexiones
• 15 Abdominales
• 20 Saltos de tijera
• 25 Sentadillas
• 30 segundos de Plancha

 

 

¿Debo comer antes o después de un entrenamiento?

La pregunta del millón, probablemente una de las más repetidas cuando se trata de comidas y entrenamiento. La realidad es que no existe una respuesta fácil de sí o no, ya que tiene muchos matices. Te lo explicamos.

Lo ideal siempre será que realices una ingesta de alimentos balanceada al menos 3 o 4 horas antes del entrenamiento. Hacer ejercicio al poco tiempo de haber comido puede provocar problemas estomacales que dificulten tu entrenamiento.

Pero ¿Qué hago si voy a realizar mi rutina de ejercicios a primera hora de la mañana? Cuando te despiertas, tu nivel de azúcar en sangre está en su punto más bajo, por lo que, en principio, no es recomendable que hagas ejercicio sin comer nada antes.

Si este es tu caso, una buena práctica podría ser empezar tu día comiendo una pieza de fruta o algún alimento que te aporte la suficiente energía como para hacer frente a tu rutina de ejercicios.

 

Desde el equipo de Ekilib recomendamos que antes de tomar una nueva rutina de ejercicios o dieta, hables con un profesional que te pueda asesorar. De lo contrario, puede que la rutina no favorezca tu situación en base a lo que quieres conseguir. Para ello puedes contactar hoy mismo con nosotros, cualquiera de nuestros profesionales estará encantado de atenderte.

Todo lo bueno llega su fin, y el final de agosto trae consigo la tan temida vuelta de vacaciones. Aunque sabemos que volver de las vacaciones sin pasar por la famosa depresión postvacacional es más fácil decirlo que hacerlo, especialmente cuando se trata de la comida. Las vacaciones son una oportunidad para salir a cenar, probar nuevos platos y disfrutar de todos esos postres.

Ya te contábamos en nuestro anterior post los mejores consejos para mantenerte sano en tus vacaciones. Ahora con la llegada de Septiembre y la vuelta a la rutina, te contamos los consejos para volver a la normalidad después de las vacaciones.

No te sientas culpable

Debes ser consciente de que las vacaciones son un momento para darse un gusto sin tener que sentirte culpable. Ahora que estás de vuelta, arrepentirte de lo que has hecho no va a cambiar nada. No dejes que las preocupaciones por tu peso o calorías te impidan seguir adelante con todo el progreso que habías obtenido antes de irte.

Vuelve a tu horario normal

Una de las mejores maneras de volver a la normalidad después de las vacaciones, en términos generales, es recuperar el horario de tu rutina habitual. Es posible que hayas llegado con algo de jetlag, o que simplemente tu horario fuera más nocturno que de costumbre.

Trata de obligarte para volver poco a poco a recuperar tu rutina, aunque esto suponga alguna que otra hora menos de sueño. De esta manera a tu cuerpo le resultará más fácil dejar atrás las vacaciones y ser consciente de la vuelta.

Continúa con tu plan de entrenamiento

Reanudar tu plan de entrenamiento te será de gran ayuda para deshacerte de esos kilos no deseados post vacacionales. Nuestra recomendación personal es que te lo tomes como un nuevo inicio, es muy importante que trates de conseguir la motivación que necesitas después de un largo periodo de descanso.

No hay mejor momento para seguir con tu entrenamiento y marcar nuevas metas que a la vuelta de las vacaciones.

 

 

Aumenta el consumo de agua

El exceso de alcohol durante las vacaciones y las largas horas de regreso a casa pueden provocar deshidratación. Como consecuencia, probablemente te encuentres mucho más cansado y con sueño constante.

Para evitar esa sensación de malestar te recomendamos que a la vuelta de vacaciones trates de incrementar tu consumo de agua. Ayúdate de apps para mantenerte hidratado o simplemente configura alarmas que te hagan recordarlo.

Evita los alimentos procesados

A medida que vayas recuperándote de las vacaciones, es conveniente que evites los alimentes procesados y preenvasados. Si bien es posible que no tengas todo el tiempo que te gustaría, comer alimentos sanos no implica recetas que consuman mucho tiempo.

Empieza por cambiar las bolsas de patatas fritas por cualquier pieza de fruta. En lugar de preparar para la cena una pizza, puedes saltear unas verduras con pollo. En resumen, alimentar a tu cuerpo con productos frescos es uno de los mejores consejos sobre cómo limpiar tu cuerpo y comer sano después de las vacaciones.

 

Al fin y al cabo, volver a la normalidad después de las vacaciones es más fácil cuando tienes un plan, aunque esto será más fácil aun si durante tus vacaciones no cometiste muchos excesos. Si te sientes abrumado y aun no sabes cómo establecer el plan que necesitas, contacta hoy mismo con nosotros.

No es ningún secreto: Disfrutar de buena comida es una gran parte de la experiencia de las vacaciones. Aunque sabemos que tomar las mejores decisiones saludables puede ser un desafío complicado.

Las comidas interminables, las bebidas nocturnas y las reuniones con amigos hacen que sea casi imposible controlar lo que comes durante este tiempo. Por eso es importante guardar la calma y mantener hábitos alimenticios saludables, incluso si las personas con las que compartes tus vacaciones no se preocupan por lo que están comiendo.

En vez de castigarte mentalmente con pensando qué puedes comer y qué no, te mostramos 5 consejos sobre cómo mantener tus hábitos saludables bajo control durante las vacaciones.

Evita la comida rápida

Dejar un poco de lado las dietas estrictas está bien, pero hay límites.

La comida rápida es uno de esos límites. Si lo haces estarás tirando por tierra el trabajo y la disciplina que has tenido durante meses. En lugar de consumir este tipo de alimentos, busca otras opciones más saludables de tu comida favorita.

Cuidado con los buffets

Es muy fácil consumir todas las calorías de un día completo en una sola comida de buffet porque hay demasiadas opciones tentadoras. Nuestro consejo sobre los buffets es que trates de evitarlos siempre que no seas capaz de autocontrolarte.

El desayuno buffet de muchos hoteles y alojamientos es un problema diferente, aunque igual de importante. Estos desayunos incluyen comidas y ciertos alimentos de los que hay que alejarse por completo, más aún si son en grandes cantidades. Los desayunos que contienen mucho pan blanco y/o azúcar deberías descartarlos incluso antes de entrar a este tipo de sitios.

Mantente hidratado

Mantenerse hidratado, especialmente cuando te encuentras bajo el sol de verano, es importante para mantener altos los niveles de energía y evitar el agotamiento por calor. Resulta muy importante beber grandes cantidades de agua mientras estás de vacaciones.

Muchas frutas y verduras tienen un alto contenido de agua, como los pepinos, las sandías, los pimientos, la piña y los tomates, lo que las convierte en tu mejor opción veraniega para llevar ¡Además de ser un gran aporte de vitaminas te ayudara a mantenerte hidratado!

No te olvides de hacer ejercicio

Asegúrate de moverte todos los días. No te estamos pidiendo hacer 20 kilómetros diarios mientras estés de vacaciones, pero mantenerte activo todos los días hará que puedas permitirte ciertos lujos a la hora de comer.

Con esto no queremos que sigas tu rutina diaria, de hecho, te vendrá bien un descanso. Puedes tomar otras alternativas como hacer yoga en playa, recorrerte la ciudad en bici o simplemente usando el gimnasio del hotel.

 

Estás de vacaciones ¡Disfrútalo!

La buena comida también forma parte de tus vacaciones. A todos nos encanta probar la comida local del lugar que visitamos y disfrutar de los buenos restaurantes de la zona.

Cuando puedas tener una experiencia gastronómica especial, trata de disfrutar cada bocado sin remordimiento. Si eres de los que toma decisiones saludables la mayor parte del tiempo, un exceso puntual no te impedirá alcanzar tus objetivos a largo plazo.

Todo el mundo sabe que el aumento de peso es una causa común de la aparición de estrías, pero ¿Sabías que hacer dieta y perder peso también pueden causar estrías? Estas estrías suelen ser causadas por cambios rápidos en la forma de la piel y el estiramiento que esta sufre.

Si tu plan de dieta y pérdida de peso resultan exitosas, querrás sentirte orgulloso de tu nueva apariencia. Esto puede cambar para ciertas personas, ya que para algunos las cicatrices de las estrías pueden dañar su confianza y hacer que puedan llegar a sentirse inseguros. Si este es tu caso o simplemente quieres que tu cuerpo luzca de la mejor manera posible, hoy en Ekilib te traemos 4 consejos.

 

Bajar de peso lentamente

Resulta muy tentador perder la mayor cantidad de peso en el menor tiempo posible, pero debes saber que la pérdida drástica de peso aumenta la probabilidad de que aparezcan estrías. Además, la rápida pérdida de peso generalmente se consigue mediante dietas o planes que no son sostenibles en el largo plazo. Por esta misma razón, siempre es conveniente un plan que te permita perder peso de manera gradual a lo largo del tiempo.

Incluye ejercicios de estiramientos en tu rutina

El estiramiento mejora la circulación y la elasticidad de la piel, manteniéndola más suave y menos propensa a la formación de estrías. Por eso te recomendamos que estires antes y después de cada entrenamiento, enfocándote sobre todo en las partes del cuerpo que son más propensas a la aparición de estrías.

¿Cuáles son las zonas más propensas a la aparición de estrías?

En general, las estrías pueden aparecer en cualquier lugar donde se pueda almacenar grasa, dejando marcar en el cuerpo. Aunque existen ciertas zonas en las que la probabilidad es mayor, como son:

• Hombros y brazos
• Zona abdominal y caderas
• Pecho y senos
• Nalgas
• Muslos

 

Come alimentos ricos en vitaminas

Hace semanas ya te explicábamos por qué son importantes las vitaminas. Además, resulta especialmente importante comer alimentos ricos en vitaminas y nutrientes para promover la producción de colágeno, que ayuda a prevenir la aparición de estrías. Los alimentos que contienen vitaminas E, A, C, Zinc y el omega-3 tienen que estar sí o sí en tu plan de dieta.

 

Mantente hidratado

Mantenerte hidratado las 24 horas del día es una de las mejores cosas que puedes hacer para que su piel se mantenga saludable y suave a la vez. La piel suave no desarrolla estrías tan fácilmente como lo haría la piel seca, que es más propensa a quebrarse y formas cicatrices. Para ello, se recomienda beber una media de 3 litros de agua al día.

Por otra parte, deberás mantener tu piel hidratada pero no tan solo con la ingesta de agua. La aplicación cremas o aceites para la prevención de estrías, harán que tu piel se mantenga hidratada para reducir la probabilidad de que estas aparezcan.

 

Ahora que ya conoces estos consejos de la mano de Ekilib, aplícalos en tu día a día y no dejes que las estrías se interpongan en tu nueva confianza en ti mismo.

Es posible que más de una vez hayas escuchado que la enfermedad celiaca es lo mismo que la intolerancia o alergia al trigo. Un fallo muy común que cometen muchas personas y corresponde a un mito popular.

Aunque la enfermedad celíaca puede parecer similar a la intolerancia al trigo debido a la necesidad de evitar ciertos alimentos. Estas dos condiciones son completamente diferentes, con diferentes efectos y tratamientos para la salud.

¿Qué es el gluten?

Para conocer la base de las condiciones relacionadas con el gluten, es importante entender primero qué es el gluten. El gluten es una familia de proteínas entre las que se encuentran cereales como el trigo, el centeno y la cebada. Es importante destacar que no todos los alimentos sin gluten están libres de trigo, y no todos los alimentos sin trigo son sin gluten.

¿Qué es la intolerancia al trigo?

La intolerancia al trigo es una de las intolerancias alimentarias más comunes en España. Una intolerancia alimentaria es la reacción del sistema inmunológico de su cuerpo a una proteína específica en un alimento, como el trigo o la leche. El consumo de alimentos a los que es intolerante, o incluso alérgico, puede desencadenar una reacción que involucra diferentes síntomas, desde picazón, enrojecimiento y urticaria, hasta sibilancias, incapacidad para respirar y pérdida del conocimiento en el peor de los casos.

Es importante recalcar que las personas intolerantes al trigo son intolerantes a una parte del trigo, que no siempre es la parte del gluten.

¿Qué es la enfermedad celiaca?

La enfermedad celíaca, también llamada celiaquía, también es una afección inmunológica grave, y las personas con enfermedad celíaca deben evitar por completo ciertos ingredientes, tal como lo hacen las personas con intolerancias o alergias alimentarias, pero las similitudes terminan ahí.

La enfermedad celiaca es un trastorno autoinmune que hace que las personas genéticamente susceptibles respondan de manera negativa al gluten. Con el tiempo, a medida que el gluten desencadena respuestas inmunitarias, el revestimiento del intestino delgado se daña. Sin un diagnóstico y un tratamiento adecuado, es probable que las personas con enfermedad celíaca sufran de malabsorción, la incapacidad del intestino delgado para absorber nutrientes en el torrente sanguíneo.

¿Qué es la sensibilidad no celiaca al gluten?

La sensibilidad no celiaca al gluten se conoce popularmente como intolerancia o alergia al gluten. Muchos síntomas de la sensibilidad al gluten son similares a los de la enfermedad celíaca, como diarrea, náuseas y fatiga. Sin embargo, la sensibilidad al gluten no provoca una respuesta inmunológica o daño intestinal. Esto hace que el sistema inmunológico no afecte a los propios tejidos intestinales de tu cuerpo, haciendo que la sensibilidad al gluten sea una condición mucho menos perjudicial para la salud.

Si crees que padeces cualquiera de estas intolerancias, enfermedades o sensibilidades, tu primer destino es un médico especializado en ello. Una vez con el diagnóstico en mano, desde Ekilib podemos ayudarte a lidiar con cualquiera de tus intolerancias alimentarias.

¡Enhorabuena! Acabas de dar el primer paso para empezar a perder peso. El simple hecho de hacer clic en el enlace para llegar hasta aquí, ya demuestra que tienes buenas intenciones para tu salud y estilo de vida.

Vamos a ser sinceros, bajar de peso no es tarea fácil. Afortunadamente, existen una serie de pasos a seguir para perder peso mientras mantienes una vida activa y saludable, sin dietas milagrosas o extremas.

Comienza con un profesional

Sabemos que es muy tentador tratar de solucionar nuestros problemas preguntándole a Google. De hecho, es probable que hayas llegado aquí de esa manera. Pero es importante recordar que no todo lo que hay en internet es cierto, y lo que le funciona a otra persona no tiene por qué funcionarte a ti.

Cada persona tiene unos objetivos únicos, un historial de salud y unas condiciones médicas diferentes a la de cualquier persona. Estos datos son esenciales a la hora de poder establecer un plan personalizado, que solo un profesional podrá hacerlo, para que puedas alcanzar y mantener un peso saludable.

Establece un plan

Una vez que tengas los objetivos marcados, ya sea un número dentro de una escala, una mejor condición física o un número en concreto. Es hora de crear una hoja de ruta que te permita llegar hasta ahí.

Lo más importante es tener claro que lo vas a conseguir, y trabajar en ello. Obsesionarse con fechas o objetivos semanales muy estrictos solo hará que te frustres y decidas tirar la toalla. Por eso desde Ekilib siempre recomendamos una dieta que se enfoque en la constancia, para anteponer el objetivo marcado a la rapidez.

Comienza poco a poco

¿Acabas de empezar y ya te sientes agobiado? ¡Es normal! Cambiar tus hábitos diarios y tu estilo de vida lleva su tiempo. La buena noticia es que no tienes por qué cambiar tu vida de la noche a la mañana, no se trata de eso, sino de entrar en un proceso en el que consigas avanzar progresivamente.

Nuestra propia experiencia nos dice que cuando se empieza una dieta poco a poco (con todo lo que conlleva), hay una probabilidad mucho mayor de éxito que si, por el contrario, decidimos poner nuestra vida patas arriba de la noche a la mañana.

Consigue ayuda

La pérdida de peso no es un viaje para hacerlo solo. Necesitarás apoyo moral y psicológico de personas que te apoyen siempre que puedan. Habrá días que pienses que estás perdido, o que simplemente no te apetezca dar ese esfuerzo necesario para perder peso. El apoyo de gente cercana a ti será primordial para sobrellevar tus peores días.

Algo tan simple como contarle a un buen amigo o a tu familia cuáles son tus objetivos, o encontrar un compañero con el que entrenar, hará que el día a día te parezca más sencillo y llevadero.

 

Si te sientes preparado para comenzar tu nueva etapa para perder peso y conseguir ese estilo de vida saludable que tanto deseas. Programa ya una cita en Ekilib y te ayudaremos a cumplir cada uno de tus objetivos.

Lidiar con la intolerancia alimentaria es una situación que no le resulta agradable a nadie, simplemente es algo que te tocará aceptar. Ser intolerante no significa necesariamente el fin del mundo. De hecho, nunca ha habido un momento con más facilidades para comer bien siendo intolerante, gracias a la alta disponibilidad de alimentos con características especiales hechas para ti.

Afortunadamente, existen formas de hacer que este proceso sea un poco más fácil de sobrellevar. Aun así, el camino para adaptarte requerirá un cierto compromiso y dedicación por tu parte. Por lo que es hora de que vayas preparándote para hacer algunos cambios en tu estilo de vida.

El primer paso que recomendamos desde Ekilib es someterse a pruebas de intolerancia. Nos gustaría aclarar que no somos médicos, y necesitarás diagnósticos profesionales para que tu dieta sea lo más saludable posible en relación a tus diferentes intolerancias alimentarias. Este tipo de pruebas son un perfecto punto de partida para conocer con exactitud qué alimentos y bebidas causan un mayor problema en tu organismo.

Consejos para controlar las intolerancias alimentarias

1. Céntrate en lo que puedes comer

Resulta muy común obsesionarnos con aquella comida que nos prohíben comer, está en nuestra propia naturaleza. Hacer esto solo te perjudicará mentalmente. En su lugar, trata de fijarte en los alimentos deliciosos y nutritivos que SI puedes comer.

Tomate el tiempo que necesites para aprender qué alimentos puedes comer y como combinarlos con buenos ingredientes que te resulten agradables. Al hacer esto, descubrirás un mundo de posibilidades que nunca hubieras imaginado.

2. Hazlo fácil

Al principio es recomendable alejarse de las largas y complicadas recetas que podrías hacer, es preferible que vayas a por aquellas comidas más simples. Esto hará que tu proceso de adaptación sea más rápido y mentalmente más llevadero, a la misma vez aprenderás poco a poco a llevar tu nuevo estilo de vida alimenticio.

Esta es una solución a corto plazo que te dará tiempo para adaptarte. Con el paso de las semanas te recomendamos hacer comidas cada vez más elaboradas. De esta forma en unos meses obtendrás un cambio total en tu dieta y ni siquiera te habrás dado cuenta.

 

 

3. Sé exigente con las intolerancias

En la actualidad no hay excusa, hay miles de posibles sustituciones disponibles para todo tipo de intolerancias. Es importante para tu salud que cuides de tu alimentación en cada comida, todos los días. Estamos seguros de que tu organismo te lo agradecerá, sobre todo a largo plazo.

4. Aprende a controlar el presupuesto

Somos conscientes de ellos, por lo general la sección de alérgenos en los supermercados suele ser más cara. Si tu nueva rutina alimenticia te resulta todo un desafío económico y no consigues mantenerte en tu presupuesto estimado, existen algunas alternativas. Para ello hemos creado un artículo en el que te mostramos Consejos para ahorrar a la hora de hacer la compra

Desde nuestra experiencia, recomendamos a todos nuestros clientes estos 3 tips básicos:

• Crear un plan de comidas semanal, en Ekilib podemos echarte una mano con esto.
• Comprar productos al por mayor, muchas empresas ofrecen paquetes de gran tamaño.
• Comprar productos cultivados localmente y vendidos en los mercados, fuera de los supermercados y las grandes empresas.

 

Un sistema digestivo saludable es esencial para tu bienestar físico y mental. La digestión que se realiza en el sistema digestivo es un proceso muy importante para proporcionar al organismo los nutrientes de las comidas y bebidas que ingieres. Este sistema digestivo es el encargado de descomponer los nutrientes en pequeñas cantidades para que tu cuerpo los absorba y funcione correctamente.

Resulta bastante común encontrar personas que tienen hábitos poco saludables que perjudican su sistema digestivo y no son conscientes de ello. Por eso, es importante saber que si no cuidas lo suficiente tu sistema digestivo estarás empeorando tu salud a pasos agigantados sin saberlo.

Causas de un sistema digestivo poco saludable

Dieta poco saludable: Comer alimentos procesados (o ultra procesados), comida basura o una dieta basada simplemente en carbohidratos, azúcar, sal y grasas te conducirá a tener un sistema digestivo poco saludable. Este tipo de alimentos bajo en nutrientes ralentiza el proceso de digestión haciendo que el estómago se hinche.

Comer en exceso: Igual que en el anterior caso, comer en exceso también ralentiza el proceso digestivo. Esto significa que los alimentos que ingieras permanecerán en tu estómago más tiempo del que deberían, siendo probable que ese alimenta termine convirtiéndose en grasa.

No beber suficiente agua: La deshidratación es una de las principales causas de un mal sistema digestivo. Puede llegar a provocar diversos problemas en el proceso digestivo como estreñimiento o reflujo ácido. Según algunos estudios, se recomienda beber al día unos 8 vasos de agua, lo equivalente a dos litros.

Falta de actividad física: El hecho de no realizar ningún tipo de ejercicio físico, hace aumentar el riesgo de dañar tu sistema digestivo. Es muy importante que incluyas en tu día a día actividades tan simples como caminar, ir en bicicleta o hacer yoga. Una rutina de ejercicio diario puede ayudar a mejorar los problemas de estreñimiento y promover una digestión saludable.

Falta de verdura y frutas en la dieta: Si no comes las verduras y frutas necesarias, aumentarás el riesgo de sufrir ciertos problemas digestivos. Este tipo de alimentos son fundamentales, ya que al ser ricas en fibra y celulosa hacen prevenir el estreñimiento y fortalecen el sistema digestivo.

Falta de sueño: No dormir lo suficiente y de forma adecuada puede llegar a provocar problemas como reflujo, síndrome del intestino irritable o la dispepsia funcional. Todos estos problemas de salud están directamente relacionados con un sistema digestivo poco saludable.

 

Tu salud en general, incluido tu sistema inmunológico, dependen de un correcto funcionamiento del sistema digestivo. Mirar hacia otro lado y no cuidarlo lo suficiente podría causar un gran daño a tu salud. En el caso en el que tu sistema digestivo no funcione correctamente, estresará y sobrecargará otras muchas funciones que tu cuerpo realiza.

De ahí nace la crucial importancia de mantener un estilo de vida saludable y una dieta alimentaria acorde a este modo de vida. Desde Ekilib podemos guiarte paso a paso para que consigas cumplir con la nutrición adecuada que necesitas ,y no perjudicar así tu sistema digestivo.